La sombra la dura realidad
muchos dicen:
que de ti no queda ni la sombra,
pero tú sigues, eres mi sombra
y tu sombra sigue en mí, en mi interior
como una herida que no sana,
como el sol cuando se oculta tras el rio Cauca
Hace tanto tiempo que lloro
pero aún te espero,
te fuiste sin un adiós
sin un aviso
sin un ¿por qué me dejaste con dolor?,
tras el umbral de mis dolores yo miro
tras mis heridas y fracasos,
solo queda un frío intenso,
con tu inocencia, tus amores,
la espina cruel del desengaño
llegas como el sol dándome tu sombra,
como una suave brisa en las mañanas
como las flores perfumando mi dolor,
nace de nuevo en mi tu sombra
esa sombra que recuerda hoy mi soledad.
Miro tu sombra y renaces con tu sonrisa
tu inocencia
llegan con el sol las sombras de mi soledad
y tu sombra sigue aquí, llorándote
y a pesar de todo sigo esperándote,
pero solo hay sombras devorando mi interior
mi vida sin ti es un barco en altamar
un camino que no sabe dónde va
una historia sin final
solo el silencio de tu sombra
Luz Edilia Flores recordando a José Ernesto Moran Flórez
